Perdida en la obscuridad

Se encontraba dando un paseo nocturno de un momento a otro llego a ese lugar, ni ella misma lo sabia, solo sabia que todo estaba oscuro y le daba un poco de miedo, sabia que habían antorchas en los pasillos pero debía prenderlas y por desgracia no andaba con ningún fósforo ni nada que se le pareciera.



Siguió caminando por los pasillos subterráneos pero su intuición le decía que precisamente no se acercaba a la salida si no que se perdía cada vez mas en esos pasillos-espero que alguien milagrosamente se de cuenta que no estoy o también serviría que alguien mas revise estos túneles-dijo un tanto asustada y con unas pequeñas lagrimas queriendo caer de sus ojos.

Se encntraba haciendo el recorrido que hacia todas las noches por los frios tuneles, lo habia recorrido tantas veces que a pesar de que todos esos tuneles podian ser considerados un laberinto, conocia el camino de memoria incluso con las antorchas sin encencder.

Camino en silencio con las manos en los bolsillos, no hacia ni un ruido, como si nadie esttuviera ahi, sin embargo sintio una presencia asi que rapidamente encendio una antorcha con un fosforo que llevaba en en una cajita.

Cuando vio que si era una persona, hablo con voz algo seria.
-No deberias estar aqui...

Estaba demasiado sumisa en su desgracia que decidió acurrucarse en la pared, sentándose y tomando sus rodillas tratando de sentirse protegida,ya no aguantaba mas se encontraba llorando a mareas pero sin emitir ruido alguno aunque de repente uno que otro sollozo que ya no podía contener.


Estaba tan sumida en su llanto que no noto como el lugar era un poco mas alumbrado, hasta que sintió la voz de alguien, asustandola al comienzo pero luego levanto el rostro lleno de lagrimas-¿se...señor Enescu?-pregunto un poco dudosa, estaba contenta de ya no estar sola en esos lugares pero de todas formas sus lagrimas seguían cayendo y quitandole la fuerza en las piernas para levantarse-

Noto que la chica le habia reconocido y se compadecio de su condicion, y se agacho proximo a ella, aproximando su mano lentamente a su cabeza acariciandole la misma junto a sus cabellos. Le quito unas lagrimas de su rostro con su dedo indice, sonriendole con un aire paternal.

-¿Te encuentras bien?- le pregunto con voz tranquila aun acariciandola para intentar calmarla un poco.

Vio como el chico se acercaba a ella y luego se ponía a la altura de ella acariciándole la cabeza y luego secando delicadamente las lagrimar con una sonrisa en el rostro, actos que la hicieron sonrojar inmediatamente.


-Si estoy bien-dijo sonrojada al recibir las caricias de él y recordando el miedo que había sentido-de seguro creerá que soy una tonta por estar llorando...pe...pero es que...-unas pequeñas lagrimas comenzaron a caer nuevamente-la...la...lamento parecer tan débil-mientras seguía llorando un poco.

Mantuvo en su rostro todo el tiempo aquella sonrisa, para calmar a la chica de alguna forma mientras volvia a limpiar algunas lagrimas de la chica con el mismo dedo, con suma delicadeza. Sabia que la condicion de la chica era normal, aquel lugar era bastante tetrico y era facil perderse en el, mas aun con todas esas antorchas apagadas.

-No pasa nada, que estes asi es totalmente entendible, Anastacia-pronuncio el nombre con una extraña delicadeza y le dio un suave abrazo a la chica para calmarla y que se desahogara.

-Gra...gra..gracias-dijo con dificultad ya que los sollozos le dificultaban el habla, sentía como retiraba delicadamente las lagrimas de su rostro, a pesar de parecer un poco tenebroso por ser su trabajo era todo lo contrario, era alguien amable y cariñoso.


-Usted es bastante comprensible joven Enescu-dijo un poco mas tranquila cuando sintió como era abrazada delicadamente y en ese momento de verdad lo necesitaba así que sin dudarlo se aferro a él necesitando protección.

-No es nada- le contesto y sonrio mas cuando sintio a la chica aferrarse a el, abrazandola con mas confianza y apoyando su cabeza en la suya acariciandole lo cabellos- Supongo que lo soy, bella Anastacia-le dijo algo divertido, solia tratar de bella a toda mujer, pero siempre era honesto ya que para el todas eran asi.

-Y por favor llamame Vlad, si asi deseas-le dijo divertido, que lo trataran por su apellido se le hacia algo extraño.

-Gra...gracias nuevamente-dijo un tanto avergonzada por lo que había hecho, aunque de todas formas no se apartaba de él ya que se encontraba a gusto y el le daba confianza-gra...gracias también por...por lo de bella aunque no...no lo soy-dijo asegurando lo que decía.


-Esta bien joven Vlad...así lo llamare desde ahora-dijo divertida y separándose levemente de él.

-Repito que no es nada, es mi deber- le volvio a decir acariciandole los cabellos y diciendole con una voz calmada- Si que lo eres, te lo creas o no ... eres una linda y bella chica-le aseguro levantandose y tendiendole la mano para ayudarla- ¿Te ayudo a volver?-le pregunto con su mano tendida.

La salida del lugar quedaba no muy lejos, pero de todos modos daba una buena caminata. Aunque la chica no deberia estar ahi, supuso que por lo complejo que eran aquellos tuneles no sabria ni por donde iba.

-Bueno es su deber cuidar el establecimiento y no a una estudiante tonta que se pierde-dijo naturalmente hasta que sintió nuevamente las caricias en su cabello, sonrojándose nuevamente por el acto y por las palabras de él-e...esta bi...bien -dijo nerviosa y tomando la mano de él.


-Cuanto e caminado como una tonta por estos túneles-pregunto avergonzada al por saber que era una tonta al haberse perdido en ese establecimiento y todo por tratar de saber en que lugar estaba viviendo.

-Es mi deber velar por el bien de cada estudiante, mas aun si se trata de una hermosa dama- reitero con un tono amable, cogiendo con su mano libre la antorcha encendida, con cuidado la llevo de la manera correcta para iluminar su paso. Entrelazo los dedos con los de la chica con su otra mano, sin percatarse mucho de su reaccion y empezo a caminar lentamente, llevandola.

-Pues has caminado bastante en verdad...-le respondio luego de pensarlo un poco, se habia adentrado bastante y la verdad es que en ese tipo de tuneles uno no sabe que tanto se adentra con un par de pasos.

-Mu...muchas gracias nue...nuevamente por lo de hermosa dama-dijo muy nerviosa y bastante sonrojada viendo como parte del lugar era alumbrado por la antorcha para poder luego salir de esos túneles, cuando sintió como una de sus manos era entrelazada con la de él, sin poner resistencia del acto se dejo guiar por él caminando bastante sonrojada.


-Ya veo...¿aprox...aproximadamente cuando habrá que caminar?-pregunto tímidamente ya que en su interior la situación no le molestaba para nada.

-Solo digo la verdad- hablaba con un tono bajo sin dejar de caminar despacio para no apresurar a la chica, disfrutando de su compañica y acariciando su mano levemente.

-Yo creo que saldremos de aqui en unos ... treinta minutos, o un poco mas- dijo aproximando el tiempo con la velocidad a la que iban, mas la distancia que recorria todas las noches. El fuego de la antorcha debia durarles, pero de la nada empezo a correr una brisa fria.

-Gracias-volvio a decir timidamente mientras caminaba lentamente junto a él compañia que no le disgustaba, de un momento a otro se sonrojo notoriamente al sentir como el le acariciaba la mano que tenia entrelazada con él.


-Ya veo de todas fromas falta bastante-dijo ya demostrando el cansancio que le daria caminar todo eso, cuando de la nada comenzo a correr una fria brisa-eso dío frio-dijo cubriendose con el brazo que tenia libre y luego observando la antorcha-casi se apaga y si eso ocurre quedariamos a oscuras-dije un poco preocupada.

-Si nos llega a pasar eso y el fuego se apaga, entonces encendere otra ...- el lugar era como un largo corredor, y habian varias anotrchas apagadas a sus lados, separadas por algo mas de metro y medio.
Continuo caminando en silencio, y mas de una brisa los sorprendio, eran frias pero suaves, hasta que una de las tantas apago la antorcha que el rumano tenia en su mano, la situacion lo sorprendio e hizo que la antorcha apagada cayera de su mano y rodara por el piso.

-Diablos...-maldicio la situacion, su suerte iba mal.

Seguia caminado guiada por él sitiendo las frias brisas que pasaban cuando derrepente la antorcha que los guiaba se apago con uno de las tantas brisas-Ahhh!!!-lanzo un pequeño grito asustada por el repentino apagaon-lo...lo...lo lamento-dijo un tanto avergonzada por sui infantil actitud.


-Siento que de verdad soy un estorbo en este lugar, ya que me tiene que llevar a la salida, de verdad lo lamento-bajando levemente el rostro avergonzada-¿si desea dejeme a mi suerte? yo vere como salgo-aun con la cabeza agachada.

Rapidamente se aproximo a coger otra antorcha en la oscuridad, la cual escendio rapidamente para darles luz cuanto antes. Luego la dejo en la pared de donde la habia sacado y se agacho para quedar a la altura de su acompañante y mirarla fijamente a los ojos.

-No permitire que digas ese tipo de cosas... no te dejare a aqui a tu suerte, menos si algo malo pueda pasarte- acerco su rostro lentamente al de la chica y cerro los ojos despacio- No podria...-su voz fue un susurro, haciendo contacto con los de la chica, besandola lentamente y esperando una respuesta.

Sintio como el caminaba un tanto apresurado y como encendia nuevamente otra antorcha iluminado el lugar nuevamente haciendola dar un tranquilizador suspiro-que alivio-dijo tocandose el pecho con la mano.


-Lo...lo...lamento enserio es solo que de verdad me siento un estorbo-dijo sintiendose mal nuevamente, cuando de la nada vio como el chico acercaba su rostro ald e ella-jo...joven Enescu-sonrojandose mas aun al sentir como juntaba sus labios con los de ella besandola lentamente no sabia por que lo habia hecho pero no le desagradabe, timidamente le comenzo a corresponder aunque de forma torpe ya que no poseeia experiencia alguna.

Debia ser que la chica no habia besado nunca a alguien o solo poseia poca experiencia, aunque era tecnicamente lo mismo de cierta forma, pero al rumano no le importaba. Al sentir como era correspondido sonreia entre besos y lentamente introdujo la lengua en la boca ajena.

Apego a la chica a el rodeandola por la cintura y acariciando su cabello, sintiendolo pasar entre sus dedos para acariciar la espalda de la chica.

Sintio como él introducia su lengua en la boca de ella, sin saber que ahcer lo dejo pasar dejandolo recorrer toda su boca, ahciendola sonrojar cada vez ams con las nuevas sensacones que el chico la hacia sentir.


Su cintura fue rodeada por los brasoz de él, asi ella redeandolo por el cuello inconcientmente mientras sentia como le acariciabaa el cabello y luego su espalda haciendola sentir un extrañopero agradable escalofrio.

Siguio jugando con la lengua de la chica, sin preocuparde de la falta de experiencia de esta, solo sintiendo como la joven le respondia y el hombre se dejaba llevar por el momento.

Corto el beso lentamente y sin prisa, separando aquellos labios lentamente de los otros, dejando un tenue hilo de saliva entre ambos y la miro a los ojos sin decir palabra alguna. Sus manos bajaron a su cintura y nada mas, quedo expectante.

Dejaba que el sigfuiera jugando con la boca de ella a su antojo ay que no sabia que mas hacer aparte de dejarse beser y corresponderle de la torpe forma en que podia dejandose llevar por el beso.


Sintio como el cortaba el beso, lentamente y separandose de ella que aun mantenia los ojos cerrados tenia verguenza de abrilos estaba mas que sonrojada.Desidio abrilos cuando vio que el chico la observaba fijamente sin decir nada, solo rodenadola por la cintura.

Cuando noto que la chica abria los ojos timidamente, acaricio el cabello y tambien su labio inferior cone l indice, quitandolo para depositar un suave beso en ellos y sonreirle. La contemplo un tiempo mas hipnotizado por sus tiernos ojos, acerco sus labios a su oido y le hablo en un fugaz susurro.

-Te quiero- debia ser la priemra vez que lo decia, segun recordaba.

Sentia como el le seguia acariciando el cabello y como luego le acariciaba su labio haciendola sentir bastante a gusto, cuando retiro su debo, sintio como el depositaba un suave beso, luego lo observo mientras él le dedicaba una sonrisa observandola dictamente y luego acercandose a su oido diciendo las ultimas palabras que ubiera pensado en oir.


-¿que...que..que dijo joven Enescu?-se encontraba atonita su sub conciente aun no podia asimilar ni creer lo que habia oido-lo unico que le pido es que no juegue conmigo de esa manera-dijo bajando la vista un poco triste al pensar que lo que él le habia dicho no era mas que uno broma.